California ha retirado su solicitud de exención federal necesaria para implementar la regulación de Flotas Limpias Avanzadas (ACF, por sus siglas en inglés). Esta decisión se tomó tras enfrentar una fuerte oposición de grupos industriales y la incertidumbre sobre el apoyo del gobierno federal. La normativa ACF buscaba transformar la industria del transporte de carga hacia vehículos de cero emisiones (ZEV, por sus siglas en inglés) exigiendo a los operadores de flotas eliminar progresivamente los camiones diésel, con una transición completa para 2042.
La regulación enfrentó desafíos legales por parte de asociaciones como la Western States Trucking Association, que argumentaron que la norma era poco práctica y perjudicial para la industria. Representantes del sector destacaron la falta de infraestructura de carga y los altos costos de los ZEV como barreras significativas.
El Consejo de Recursos del Aire de California (CARB) mantiene su compromiso de reducir las emisiones a través de otras iniciativas, como la regulación de Camiones Limpios Avanzados, que regula a los fabricantes en lugar de las flotas. Esta normativa sigue impulsando las ventas de vehículos de cero emisiones en California.
Si bien algunos grupos celebraron el retiro como una victoria, reconocieron la necesidad de regulaciones ambientales sostenibles que se ajusten a las realidades del mercado. Otros, como la Asociación de Transportistas de Carga, enfatizaron la importancia de crear estándares alcanzables para avanzar en tecnologías más limpias.
La decisión de California refleja los desafíos de equilibrar objetivos ambientales con las realidades de la industria. El sector de transporte de carga sigue comprometido con la reducción de emisiones, pero, como señalaron los líderes de la industria, el progreso requiere colaboración, inversión en infraestructura y plazos realistas.